Y ya entramos en el año 1871.
En Madrid se inaugura un nuevo medio de transporte que la prensa llama "la tram-vía", que con dos pisos y escalera de caracol transporta a los madrileños desde la Puerta del Sol al llamado barrio del marqués de Salamanca.
El zar Alejandro II no acepta el acuerdo de París que no permite a Rusia estacionar buques de guerra en el mar Negro y el Bósforo.
El compositor español Emilio Arrieta, sobre un libreto de Ramos Carrión, estrena la ópera "Marina", en el teatro Real de Madrid.
A final de Mayo, la Comuna de París es abatida por las tropas gubernamentales francesas. Las masas populares de la ciudad, hambrientas, se habían hecho con el poder en la capital francesa. La derrota de Francia en la guerra contra Alemania (Guerra franco-prusiana), será el origen del conflicto, que manifestó la debilidad del gobierno de Thiers, quien ante la crisis económica, suspendió el sueldo a los guardias nacionales y la moratoria de alquiler. El hambre y la ira se extendió. El pueblo nombra la Comuna con los blanquistas, jacobinos, anarquistas y la Internacional Obrera. La revolución recorre las calles de París, pero, a pesar de la heroica resistencia popular, los revoltosos son fusilados en masa.
En Agosto, el emperador japones Mutsu-Hito, sustituye la moneda tradicional, el ryo, por el yen, al que da la equivalencia de una piastra de plata, para facilitar las transacciones económicas con occidente.
En el Reino Unido se suprime la compraventa de grados militares en el ejército, uno de los privilegios de la aristocracia.
Se inaugura el túnel de Mont-Cenis, que une Francia con Italia.
En la Alemania que ha sido unificada se adopta el marco como moneda básica.
En El Cairo se estrena la ópera "Aida" de Giuseppe Verdi, como uno de los actos solemnes de inauguración del canal de Suez.
El político francés Eugéne Pottier compone "La Internacional", himno del movimiento obrero socialista.
El Cabilia (Argelia) se produce un levantamiento campesino contra los franceses, que es aplastado por el ejército francés.
Será en este año 1871 cuando se establezcan las reglas, de once puntos, de un nuevo deporte conocido como "balón pie" o "foot ball".
Después de una larga y dramática búsqueda, el explorador Henry Stanley, encuentra a orillas del lago Tanganika al misionero y médico David Livingstone, a quien se había perdido la pista hacia mucho tiempo. En el encuentro Stanley se limita a decir: "El doctor Livingstone, supongo".
El rey Guillermo I de Prusia, es proclamado emperador de Alemania en la sala de los espejos de Versalles, certificando con ello la unificación de los estados alemanes.
Queridos lectores, las criticas sobre la actualidad socio-política se está haciendo cansina. Siempre son los mismos protagonistas, las mismas golferias, los mismos delitos institucionales, las mismas lerdas ministrables... Procuraré darle un aire algo distinto a los comentarios, y luego, que cada uno lea la prensa que más le apetezca.
"La economía -afirma una máxima- es virtud en la pobreza, prudencia en la burguesía y vicio en la opulencia"
De momento, y para aquellos que no sean economistas (yo tampoco lo soy) quería, en román paladino, que es como yo lo he entendido, explicar por qué es tan importante el famoso "Diferencial con Alemania". ¿Que es el diferencial? Pues, un ejemplo, si Alemania solicita un crédito y se lo conceden a un interés del 2% y España pide el mismo crédito y le aplican el 6%, el diferencial con Alemania será de 4. Esta cifra, en realidad representa la desconfianza del mercado inversor en una España de escasa solvencia. Cuanto mayor es el diferencial, o cuando se comprueba que, día a día se calcula al alza, es que la desconfianza inversora en los bonos españoles está creciendo, y... Malo, malo.
Cicerón aseveraba: "La renta más segura es la economía: la economía es la hija del orden y de la sabiduría".
¿Y la Deuda Pública? ¡Vaya bobada! pues la cantidad de dinero que debe España, por ahí, que tiene que devolver, y mucha de la cual le han prestado a un interés, que tampoco puede devolverse. Cuanto mas elevado sea el interés, más difícil va a ser devolverlo, sumado al capital. Esto no tiene misterio.
El verdadero asunto a estudiar es la cantidad de euros que representa esa deuda a día de hoy; la cantidad real de los intereses, a día de hoy y que, para mayor desgracia, permanente, se está ingresando, en las arcas del estado, menos de la mitad de lo que se gasta. ¡Hoy mismo, vamos! Se gasta casí el triple de los de lo que se ingresa, y eso sin pagar deudas de miles de millones de euros. (a mi me deben dinero, por diferentes conceptos, y a mi esposa la devolución de la Renta, y estamos a 12 de Diciembre).
El desdichado rey Carlos II "El Hechizado", ante una situación calamitosa del erario real, pronunció la siguiente frase: "Jamás he visto más deudas y menos dinero; si esto sigue, no daré audiencia a los acreedores".
Ayer comenté con amarga tristeza la deprimente situación moral de nuestros universitarios. ¡Que la moral no es cosa de religión ni curas! Seguro que alguien se habrá preguntado si es que yo, cuando era estudiante universitario, nunca agarré una merluza en condiciones. ¡Pues claro que sí! Nosotros nos juntábamos 10 o 12 compañeros y, guitarra en ristre, nos íbamos a recorrer los mesones, chatos de vino mediante, hasta que se acababan las perras que entre todos habíamos podido reunir. Ni que decir tiene que había noches que regresaba a casa, guitarra al hombro, en el metro, notablemente alborozado, estado que convenía disimular en lo posible, para evitar reproches de un estamento que antes era imprescindible respetar, "las personas mayores", y no digamos la jerarquía paterna. Dice un viejo refrán: "Bueno es el vino, cuando el vino es bueno; pero si el agua es de una fuente cristalina y clara, mejor es el vino que el agua".
Pero este espectáculo... ¡Vamos! a ningún universitario de mi época se le hubiera ocurrido enmerdar el monumento de la antorcha, situado delante de la Facultad de Medicina, porque, todos, bien sabíamos su significado, y se respetaba como de la familia; vayan hoy a ver la estatua del caballo y la antorcha. Hoy, y ya hace muchos años, no existe ni vivencia ni convivencia universitaria, ni, por supuesto, postura intelectual política, a pesar de la mamarrachada esa de las juventudes de los partidos (la OJE pero para agarrarse al sistema y no dar palo en su vida) o los descerebrados "antisistema", bien pagados y que ni son universitarios, ni creo que, en su mayoría sepan leer y escribir. Pues eso es lo que hay.
"Si a tu vecino quieres conocer, -dice un refrán castellano- averigua que libros suele leer". Aunque también podemos echar mano del que alecciona: "Ni todos los que estudian son letrados, ni todos los que van a la guerra son soldados".
El asunto Wiki-Leaks, que deja al descubierto incluso la escasa capacidad de Benedicto XVI para la "política" y la diplomacia, y de paso para hacer uso del sentido común en público, no tiene mucha importancia, para mi, por el asunto en sí, salvo que se le ha visto a un montón de próceres el tafanario. Lo que sí es preocupante es que, un espía hace 60 años debía penetrar en unas dependencias muy vigiladas, obtener unos documentos bien guardados, fotografiarlos con una cámara pequeñita, y salir sin haber sido descubierto; pero hoy, un tipo hábil en eso de la informática, desde su casa se mete en el Pentágono, si fuera necesario, y les hace un agujero de tres pares de dídimos. Vamos, que no existe seguridad ni nacional, ni empresarial, ni de ningún tipo. Quizás por eso afirman que es un gran adelanto. Quien sabe. Escribía Cervantes en "La Entretenida", naturalmente con otra intención, algo que puede venir aquí al pelo:
"Madre, la mi madre,
guardas me ponéis;
que si yo no me guardo,
mal me guardaréis".
Sorprendente alarde de sensatez de Joaquín Leguina, deplorando la estrategia revanchista y guerra-civilista del zapaterismo, y la paupérrima catadura intelectual del PSOE actual. Si el sentido común se extendiera por el PSOE...
Todos hemos recortado gastos en los regalos navideños, pero una cosa me ha llamado la atención, y es la pobreza de imaginación en el diseño de nuevos juguetes, el escaso interés que despiertan (en los mayores, claro), algo que otros años te obligaba a pasarte en los almacenes dedicados a los más jóvenes, hasta una mañana entera, este año, la pobre oferta, cuantitativa y, sobre todo, cualitativa, la mayoría más de lo mismo, facilita hacer las compras en un pis-pas.
Noticioso resulta que el BCE exprese, implícitamente, dudas sobre ZP y sus medidas. ¡Vaya!¡ Por fin cantó el gallo! Porque el corito de Trichet andaba dando más rodeos a la realidad española que un perro para tumbarse.
Y como despedida, una joya de Miguel Hernández (otro facha), a quien más valiera que leyeran los jóvenes actuales:
"Respeten a los ancianos
el burlarlos no es hazaña...
La cigüeña cuando es vieja,
pierde la vista; y procuran
cuidarla en su edad madura
todas sus hijas pequeñas;
aprendan de las cigüeñas
este ejemplo de ternura".
Hasta mañana.
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