Continuando el relato de 1882, la escuadra inglesa bombardea Alejandría, durante más de 10 horas, para destruir las fortificaciones que estan levantando los nacionalistas. Los franceses no apoyan esta acción y se retiran. El jedive Tewfik debe refugiarse en el buque insignia británico, huyendo de la cólera del pueblo. Los buques ingleses protegen el canal de Suez.

El 26 de Julio, Richard Wagner estrena su ópera "Parsifal" en el teatro de Bayreuth.

El parlamento francés niega los créditos de guerra para la expedición a Egipto que apoyaría la protección del canal de Suez.

En Egipto, el 30 de Julio, el consejo de ministros destituye al jedive Tewfik, nombra a Urabi Bajá comandante en jefe, y declara la guerra a Inglaterra.

En Agosto, los 14.000 miembros del cuerpo expedicionario inglés, desembarca en las ciudades de Alejandría y Suez, al mando del general Wolseley.

El 13 de Septiembre Gran Bretaña vence al ejército egipcio. Egipto pasa a ser un protectorado inglés.

En Madrid, el 7 de Octubre, la leridana Martina Castells y Ballespí, es la primera mujer española que recibe el título de doctor en Medicina.

En Argentina se pone la primera piedra de la ciudad de La Plata. La idea es que se transforme en la capital marítima de la nación.

Andalucía se ve asolada, desde hace varios años, por las actividades delictivas de una sociedad secreta llamada "La Mano Negra", integrada por campesinos que viven en un sistema socialista de reparto de bienes, que se obtienen robando, secuestrando y matando.

Concluida la guerra del Pacifico, Chile emprende una campaña contra la resistencia india del sur del país. Ello significara el fin de los araucanos.

El 2 de Junio muere en Caprera el revolucionario italiano Giuseppe Garibaldi.

Los judíos emigrados a Palestina, una zona dominada por el Imperio Otomano comienzan su asentamiento. En la región asiática viven unos 50.000 árabes y 25.000 judíos. Algunos judíos europeos les proporcionan dinero para que adquieran tierras, aperos de labranza y semillas y envían a Palestina expertos agrónomos.

En Barcelona se coloca la primera piedra de la basílica de la Sagrada Familia, diseño de un arquitecto que ya marcaba un hito en la arquitectura contemporánea: Antonio Gaudí.

El masivo aumento de la emigración a los EEUU, obliga a dictar una ley que limita la inmigración de pobres, criminales, enfermos mentales y gente de color, especialmente amarillos.

Hay un cuento muy conocido que se le atribuye a Esopo y que en resumen viene a decir así: Una rana y un escorpión se encontraron en una orilla de un río; el artrópodo necesitaba pasar a la otra orilla y pidió a la rana que le transportara sobre su lomo, ya que él no podía nadar. Ella rechazó la oferta, temiendo el ataque del temible escorpión, pero este le aseguró que, bajo ningún concepto la picaría con su ponzoñoso aguijón. El batracio, finalmente aceptó, y el escorpión se aupó a su lomo. La rana comenzó a nadar y cuando se encontraba a medio camino, notó un dolor agudo en su espalda; el escorpión le había picado.

¿Porque haces eso? no ves que nos vamos a ahogar los dos - preguntó aquel anfibio horrorizado -

Lo siento, amiga -respondió el arácnido- no he podido evitarlo, es mi ser.

En efecto, el indigno Rubalcaba, con la anuencia de toda la patulea que nos ha arruinado, desde el estúpido solemne para abajo, andan rondando a "la ciudadanía", como lo hacen las hienas, en las noches de la sabana africana, hasta encontrar el momento oportuno de lanzarse a la carga, y, quizá pensando que todos somos idiotas -y todos no lo somos- o lo más probable, porque les trae al fresco lo que opinemos sus súbditos, van a intentar aclamar hasta la nausea, algún comunicado de los asesinos vascos, que pueda interpretarse como que se arrepienten de haber asesinado a hombres, mujeres y niños, durante más de 30 años, que ya no lo van a volver a hacer y que se suman al carro activo de esto que en España se llama "democracia"...Y naturalmente que a cambio, le concedan la independencia a Vascongadas, con Navarra incluida (les está bien empleado a los navarros).

El iluminado ZP, es un muerto político que ya hiede hace meses; él lo sabe, y sabe, además, que la historia le va a recordar como la desgracia mas grande ocurrida en esta nación desde Fernando VII, por lo menos, y se ha empeñado en que, al menos figure entre los padres salvadores de la Patria, al estilo de Chavez (con z), Perón, Castro, e incluso, porque no, Simón Bolivar.

Hasta ahora, todas las negociaciones habidas con los asesinos vascos, han sido un fracaso. Aznar se negó a prometer la independencia, y casi le cuesta la vida, y los socialistas-capitalistas del PSOE, han estado mareando la perdiz, jugando al escondite con gente más peligrosa que Alfonso Capone; prometían y luego solo concedían migajas, lo único que se puede conceder en nuestras circunstancias jurídicas. Volvían a asesinar los vascos y ¡Que malos son! ¡No han cumplido lo prometido!... ¡Que no somos gilipollas! y los vascos tampoco. Ellos al menos, son consecuentes, como el escorpión, con su ser, y hacen lo único que saben hacer, aparte de cortar troncos y arrastrar piedras.Y así será siempre aunque se les conceda la independencia y funden una república marxista leninista (¿O que se piensa el PNV?). Ellos seguirán atentando y extorsionando: es su ser.

Y la culpa la tienen todos los políticos habidos desde UCD hasta nuestros días. Se les ha permitido envenenar a dos generaciones con la ponzoña antiespañola, que inventó el esquizofrénico de Sabino Arana (por cierto del PNV), y ahora a ver como se les quita de la cabeza a la gente de media edad (Y muchos viejos), a los jóvenes y a los niños vascos el odio hacia todo lo español, y su alma de criminales asesinos, reivindicado como una "guerra santa" musulmana el crímen, algo que les acompañará en aquella tierra de salvajes hasta la muerte.

De modo que insisto Rubalcabra (vaya, otra ver la erre), que no somos idiotas, vender la burra como queráis, que para unos cuantos millones de españoles, no va a colar.

Decía Benavente en el diario "El Imparcial", ocupándose de "Lectura de España" de Azorín, libro formado con artículos de periódico, debido a dicho autor: "Las mujeres y los políticos odian a todo el que no pueden engañar; por eso los hombres inteligentes no son nunca afortunados en amor ni en política" (ruego a las señoras que se lo tomen con deportividad).

Democrácia, según el diccionario de la RAE se define como: "Doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno; Predominio del pueblo en el gobierno político de un estado". Y eso es todo. Todos los demás ornamentos, arreos y perifollos, con los que se nos quiere hacer comulgar, constituyen la perversión de esta doctrina.

Por un lado, y para limitarnos a España, los sucesivos gobiernos, resumen más aún el significado del término, concediéndonos el derecho de votar una vez cada 4 años, a un partido político, y no a las personas, y san seacabó. Pero por otro lado desarrollan el concepto hasta unos niveles extraterrestres, alambicados y esquizofrénicos, que la mayoría de los ciudadanos no entiende, para nada, pero cree que le sirven como a un bienaventurado. Ello me recuerda mucho a la beatería de los años franquistas: nadie entendía lo que se decía en la Misa, puesto que era en latín, pero daba igual, todos allí eran católicos y lo que allí se dijera, seguro que era divino (¡Bendita Ilustración!).

Más de entre toda esa madeja de "derechos", miles de "derechos" que ostentan los políticos, contra uno solo de los ciudadanos (votar), y que la mecánica "Goebelsiana" ilumina como un derecho y obligación suprema, debemos sacar las espinas que nos están atragantando.

Aparisi y Guijarro reflexionaba: "El pueblo es una bestia aparejada, sobre la que monta el más osado o el más fuerte".

Esta reflexión viene a cuento, porque hoy he escuchado en la radio declaraciones de la erudita Chamosa, y quiero reiterar tres de mis supremas convicciones, de las que no pienso apearme, y que justifican que tantas veces haya declarado que yo no soy demócrata, ni participo del luminoso "Holy Day", de las urnas.

En primer lugar jamás aceptaré que mi presunto voto pueda tener el mismo valor que cualquier otro; que todos los individuos tienen los mismos derechos (dos tíos a formar un matrimonio y alquilar niños; unos delincuente convictos a votar, a aparearse o a pasear por la calle; o bien un emigrante que acaba de llegar a disfrutar las mismas opciones que los nativos, por decir solo algunas causas de exclusión), y por otro lado niego radicalmente el derecho de cualquier individuo a ser nombrado para un cargo de responsabilidad gubernamental, en cualquier administración que fuere, sin que le sea exigida la preparación académica adecuada y suficiente. A ello podemos agregar otras penurias del sistema, que yo deploro como los partidos políticos, los sindicatos y el fantasma ese de "la patronal", que deberían desaparecer de un plumazo, en una sociedad civilizada, en que las necesidades decimonónicas ya no deberían estar presentes, o habremos de aceptar que no hemos avanzado nada, en justicia social, desde el siglo XIX.

¿Y que decir de la separación de poderes? fundamento del estado de derecho, sin el cual la democrácia no tiene sentido. En fin ¡Que no soy demócrata, coño!.

Pero, lamentablemente, como decía Heine, "todo delito que no se convierte en escándalo, no existe para la sociedad". Y en España, aunque sea enormemente escandaloso, tampoco impacta en la sensibilidad del ciudadano. El español ha cambiado el 6º pecado capital, la envidia, su seña de identidad, por el 7º, la pereza; o mejor dicho la comodidad.

Siiii!, Ya se que todo esto que digo es políticamente muy incorrecto; ¡Me alegro! Por algo en sus charlas de café, Ramón y Cajal comenta:

"Con plausible sinceridad decía Teofrasto, en un banquete, al ser requerido a exponer su opinión: "Callo, porque de lo que sé fuera inoportuno hablar, y de lo que fuera oportuno no sé nada".

Y de momento no aparecen los huesos de García Lorca y Carrillo no casca.

Hasta más ver.