El 14 de Enero de 1867, el pintor neoclásico francés Jean Auguste Ingres muere en París.

Un escaso mes despues, en Madrid, también fallece el poeta y novelista malagueño Serafín Estébanez Calderón.

Y en Marzo, también en Madrid aparece el nuevo diario "El Imparcial", fundado por Eduardo Gasset.

El 15 de Marzo concluyen las negociaciones de compromiso austro-húngaro, con el juramento de fidelidad del conde húngaro Andrássy, hacia el emperador austriaco Francisco José.

El 30 de Mayo, el compositor bohemio Bedrich Smetana, estrena su ópera cómica "La Novia Vendida".

EEUU, el 30 de Marzo, compra Alaska a Rusia, por 7,2 millones de dólares.

En el mes de Mayo, en Gran Bretaña, la reforma electoral, extiende el derecho de voto a los obreros urbanos, siempre que dispongan de vivienda.

El 1 de Julio, el Parlamento Británico aprueba la British North América Act, por la que se proclama el dominio de Canadá.

En Francia, el jardinero Monier patenta el cemento armado, adelantándose a Lambot.

El 25 de Agosto fallece en Londres Michael Faraday.

Pocos días despues y en París fallece, a su vez, el poeta Charles Baudelaire.

En Japón, Yoshinobu, el último shogún, presenta su renuncia al emperador y le devuelve el poder político. Con ello finalizan 800 años de shogunado.

En EEUU Nebraska se adhiere a la unión como nuevo estado.

En Inglaterra, el cirujano Joseph Lister utiliza por primera vez el ácido fénico como antiséptico, comenzando de este modo la base de la asepsia quirúrgica.

Luxemburgo queda reconocido como estado independiente y neutral.

El gobierno de la Italia unificada hasta el momento, confisca los bienes de la Iglesia.

El compositor austriaco Johann Strauss, estrena en Viena el vals "El Danubio Azul".

En Julio es promulgada la Constitución de la Confederación de Alemania del Norte, a la que pertenecen 22 estados y ciudades autónomas, lo que constituye un paso hacia la creación de un estado nacional alemán.

El escritor madrileño Manuel Tamayo y Baus, estrena "Un Drama Nuevo".

El 19 de Junio es fusilado el emperador de Méjico Maximiliano por los soldados republicanos de Juárez.

El 14 de Septiembre, se publica el primer volumen de la obra de Karl Marx "El Capital".

En Estocolmo, Alfred Nobel patenta la dinamita, un explosivo de manejo seguro, resultante de la mezcla de nitroglicerina con tierras absorbentes.

El 1 de Diciembre, en Viena se estrena el "Réquiem alemán" de Johannes Brahms, en medio de un gran escándalo debido a la nefasta actuación del percusionista.

Aunque creada dos años antes por un grupo de oficiales sudistas vencidos en la guerra de Secesión, el Ku-Klux-Klan, comienza su ataque contra la ciudadanía negra estadounidense.

A propósito de la declaración hecha por el presidente del gobierno español, Alfredo Pérez Rubalcaba, del "Estado de Coña", que ha escandalizado hasta al apuntador (a mi no), para llevar adelante un proyecto político infumable, y ocultar, a la vez un despropósito eternizado por diferentes gobiernos de distintos colores, respecto a los controladores (nunca mejor dicho) de AENA, mediante un golpe de efecto, recuerdo una anécdota que, posiblemente les suene a muchos lectores:

Resulta que la Memoria Histórica refiere que el 13 de Abril de 1655, el rey Luis XIV de Francia se presentó en el Parlamento, con traje de caza y látigo en mano, y que, a las observaciones que el Presidente le hizo en nombre de los intereses del estado, el rey contestó con la conocida frase:

"El Estado soy yo".

Otra versión nos relata que la antedicha frase fue pronunciada en la reunión con los ministros, que tuvo el rey al día siguiente de la muerte del Cardenal Mazarino, indicando que se habían acabado los privilegios de validos poderosos, y que en lo sucesivo, él mismo sería el Primer Ministro.

El 14 de Abril de 1931, la izquierda "democrática" española, siguiendo directrices de la URSS, dio un golpe de estado, que, inexplicablemente, apoyó Alfonso XIII y los monárquicos, cediendo un poder ilegítimo al populacho, con la anuencia de las fuerzas de seguridad y el ejército. A día de hoy, el gobierno, que dice que socialista, da un golpe de efecto, con las pretensiones que ya he comentado, haciendo uso de las fuerzas armadas, para avisarnos a todos, que ostentan el espadón de mando.

Miren ustedes, la situación laboral de los controladores aéreos, por cierto, labor para la que no hace falta estudios superiores ni mucho menos, es muy parecida a la que atraviesan otras actividades dependientes de la Administración Pública, aunque la solución propuesta durante los últimos años no ha sido ni parecida. Similar precariedad laboral sufren los bomberos, los docentes, los administrativos ministeriales, las fuerzas armadas, y, como no, la sanidad, en lo que me voy a detener, pues es lo que conozco.

Parece ser que hay muy pocos controladores y en vez de formar más controladores, como su sindicato ha tenido siempre la sartén por el mango (no como UGT y CCOO que son unos lameculos del poder), a sus ya abultados honorarios, se han venido sumando una enorme cantidad de horas extraordinarias (ilegales en la administración hace años), pagadas a precio de capitán general con mando en plaza. ¡Una pasta, vamos! En la sanidad pasa otro tanto, pero peor; porque la escasez de médicos y personal de enfermería es muy alarmante hace muchos años, ya que los jóvenes se marchan al extranjero donde, no solo ganan más, sino que se les trata mejor. No se les paga a los médicos en activo, o a las enfermeras, horas extraordinarias a buen precio, para sacar el trabajo adelante, sino que se disminuye la cantidad y calidad de la asistencia prestada, se contratan médicos extranjeros, muchos de ellos con muy dudosa homologación para ejercer, e incluso se ha denunciado la obtención de titulaciones vendidas por Internet sin coger un libro.

A los médicos se nos baja el sueldo (como a todos los funcionarios), no se nos abona lo que se nos debe desde hace años (el nivel profesional correspondiente), nos niegan derechos, teóricamente inviolables, las interinidades se eternizan para evitar adquirir albedríos legales, y se nos carga de trabajo bajo cuerda (a mí me han llegado a citar, en consulta, hasta 4 pacientes a la misma hora).

A cambio, las listas de espera son intolerables (no hagan caso de lo que dice la prensa), el absentismo laboral tremebundo, en todos los escalones, no se suple el puesto de los médicos enfermos o quienes estan de permiso y, eso sí, se paga a instituciones privadas, a precio de paciente privado, las cirugías que no pueden llevarse a cabo en las instituciones públicas, por carencia de facultativos; es decir que los que se están forrando, gracias a este desbarajuste de años y años de insolvencia, son profesionales que no trabajan para el estado, o la comunidad autónoma correspondiente. ¿Me explico?

Luego ¿Es peligroso montar en avión? Puede ser que sí, pero no más que pasar por quirófano, que es una labor, para el cirujano, verdaderamente estresante, y no la de "guardia de tráfico" mirando a una pantalla.

Pero los médicos no protestamos, damos lo que podemos y sabemos, día a día, nos atizan anginas de pecho, o crisis de ansiedad y depresión por la tensión (puedo dar nombres), el sueldo no llega para mantener una familia de 4 miembros... Pero se sale como se puede, y encima aguantamos los insultos, las agresiones y las denuncias de los pacientes, algo que tenían que soportar, al menos, nuestros gerifaltes.

Y conste que formar médicos es mucho más largo (12 años) y más caro para la sociedad, que formar controladores.

Y yo pregunto: ¿En manos de quien hemos puesto esta sociedad?... Pues sigan votando.

Bueno, esto es casi un monográfico, como ya anuncié. De modo que para endulzar un poco esta letrina, voy a regalarles un romance de Francisco de Quevedo, que vienen al pelo, y dice así:

"Miré los muros de la patria mía,

si un tiempo fuertes, ya desmoronados

de la carrera de la edad cansados,

por quien caduca ya su valentía

Salime al campo, vi que el sol bebía

los arroyos del cielo desatados,

y del monte quejoso los ganados,

que con sombras hurtó su luz al día

Entré en mi casa, vi que amancillada

de anciana habitación era despojos;

mi báculo más corvo y menos fuerte.

Vencida de la edad sentí mi espada,

y no hallé cosa en que poner los ojos

que no fuese recuerdo de la muerte.

Buenas noches y que sueñen con los angelitos y angelitas.