¡Vaya gripazo que tengo!

Bien, 1842 pertenece a esos años escasos de señeros acontecimientos.

En Madrid muere José de Espronceda, a los 34 años de edad, nacido en Almendralejo, Badajoz, y autor de nombrados temas como "La Canción del Pirata" el "Himno al Sol" o su "Desesperación".

En Alemania el médico Mayer, demuestra la transformación del calor en trabajo mecánico.

En músico belga Antoine Sax, fabricante de instrumentos musicales, finalmente inventa el saxofón.

El filósofo francés Auguste Comte publica su "Curso de Filosofía Positiva", donde expone que la única máxima absoluta, es que no existe nada absoluto.

En París fallece, el 15 de Marzo el músico Luigi Cherubini.

Igualmente en París, ciudad de la cultura y el romanticismo, en esta época, muere Stendhal.

La reina Pomare de Tahití, firma con Francia un tratado de protección, al negarse Inglaterra a aceptar este protectorado.

Barcelona se revela contra el general Espartero, arrastrada por el republicanismo de Terradas y Monturiol. El 3 de Diciembre, Espartero ordena bombardear Barcelona.

El matemático y físico Christian Doppler, descubre el fenómeno acústico que lleva su nombre, y que posteriormente aplicara a la luz Fizeau.

Tras largos años de combate, el ejército británico, que ocupaba Afganistán, de religión musulmana, se retira hacia la India, tras una terrible matanza en la batalla de Parwandarah.

Bueno, pues le han llegado a Berlusconi los numeritos, para que se ganen el sueldo los antidisturbios, que padecen Francia y España (aquí, naturalmente, a favor de ZP).

Entonces, el nuevo ministro de trabajo, el pancartista del mono azul y el pañuelo rojo al cuello, que venía con las ideas muy claras, va a imponer medidas insólitas e inéditas (¡Uy! que esdrújulo) para arreglar de un plumazo el problema de las pensiones. No se lo van a creer. ¡Va a subir los impuestos! Como lo oyen. No si, donde estén las mentes innovadoras y originales. Decía Gustavo Le Bon que "cuanto más difícil es un problema político, más hombres se encuentran que se creen capaces de resolverlo". Y añadía Quevedo:

"Y para dar tales frutos,

se siembran tantos tributos..."

Pues parece ser que Rubalcaba, que dicen por ahí, que si te agachas te la clava, controla también el CNI. Pues no le pierdan de vista, mayormente cuando estamos viviendo reiterados anuncios de un inminente atentado islamista (¿debo decir, radical?). ¡Ojo! con los lugares de aglomeración y multitudes; y si ven a alguien con varios pares de calzoncillos, ponganse a correr y no paren hasta la Almunia de Doña Godina, es un suponer.

Más, el ínclito ministro de todo, está dispuesto a no perder el tiempo. Hay que reconocerle que, como mala persona, no le gana nadie en este patio de monipodio, pero como laborioso, diligente y aplicado, mucho más que Rodriguez; ¡Donde va a parar! Y decía yo que, la comadreja calva ya ha empezado, como yo anticipé hace días, con los insultos y descalificaciones contra la oposición, aunque no sea más que para tantear el terreno, que es blandito como la gelatina de fresa, y así tirar hasta las elecciones. Eso, y lamerle el culo a los independentistas y asesinos vascos, para ver si dicen que dejan de matar, un rato, para que automáticamente sean buenos chicos (como los chavales de la gasolina, o las bestias sindicalistas, por poner dos ejemplos), y así ZP puede largarse, al menos como un salvador, se le da de maravilla. A pesar de ello, el gran Ercilla rimaba así:

No hay contra el desleal seguro puerto,

ni enemigo mayor que el encubierto".

Pero, no es solo Rubalcaba, "El Siniestro", el único que juega al escondite con la suelta de asesinos y delincuentes comunes vascos, sino también, ese grupo de puñeteras togas, teñidas de sangre (con el negro no se nota), pertenecientes a seres que tienen por cerebro una olla podrida de grillos, de entre los que podemos entresacar al fiscal Bautista o al juez de Castro, como ejemplo de abogaduchos ramplones y serviles. ¡Hala a lamer, hijos, a lamer!. Ya nos advertía Mirabeau: "Si quieres triunfar en este mundo, matad vuestra conciencia".

"The Economist" se dedica a buscar sucesor a ZP. Sobre ese tema, por lo menos de momento, yo, ni pío, porque ya se encarga la prensa de llenar páginas de majaderías.

Afirma el embajador de los belgas en España que la convicción de la mayoría de sus ciudadanos es permanecer unidos. Desde luego para ejercer la diplomacia hace falta un sentido del humor y una impavidez facial francamente, -perdón, quise decir realmente- excepcional.

De modo que ahora llega un experto de esos que aparecen, últimamente, como las setas en otoño, aunque nunca sabremos en que son expertos, americano él, y afirma que el reto en la educación no está en el contenido de la enseñanza, sino en la forma de transmitirla. Es decir, que es mucho más deseable aleccionar a los niños y jóvenes, en Educación para la Ciudadanía, por ejemplo, y por supuesto ignorando la historia, la geografía, la gramática española (eso de "la lengua"... Para la Sinde), el arte, la humanística, la física, los idiomas (vivos y muertos), y demás temas de escaso interés, pero, eso sí, para informáticos, nada de boligraferos. Como dice Mafalda, el problema de escuchar estas cosas es llevar las orejas puestas todo el día. A pesar que Manero afirmaba que " La verdadera educación de un hombre, comienza varias generaciones atrás", Marañón puntualizaba que: "Toda la obra de la educación no es más que una superación ética de los instintos", algo que la informática no contiene en el disco duro.

Un individuo, cuando menos peculiar, llamado Jigme Thinley, a la sazón primer ministro de Buthán (una personalidad mundial) se descuelga con que el estado tiene la responsabilidad de ayudar a sus ciudadanos a ser felices. Verá don Jigme, puede que en aquel diminuto rincón asiático, de bellísimos paisajes, limitado por las encrespadas cumbres del Himalaya, que sería mucho más bello si se largaran los chinos, y budista, para más señas, la búsqueda de la felicidad, resulte una pretensión inaplazable. Lo entiendo. Pero por estos pagos occidentales, yo soy más partidario de que el estado y su gobierno, cumplan con sus cometidos respectivos de representación digna de los ciudadanos, y administración honrada de sus bienes, y no se metan a organizarle la vida a los contribuyentes, que cada uno sabe como rascarse lo que le pica, y nos dejen en paz. Como los árbitros de fútbol, que no se les note. Pero gracias por el consejo.

Y para dar término a este relación de desatinos (no, Moratinos, no), resulta que el presidente de Cantabria, el abnegado Revilla, el de las anchoas, despues de mucho pensar en su despacho durante horas, tras ordenar que nadie le molestara, va y dice que robar es mucho peor que fumar. ¡Hombre! eso depende de lo que se fume, porque luego, sin querer, se mezcla con alcohol y algún otro estimulante, bajo prescripción facultativa, claro, y acaba uno por exhibirse de manera tan poco edificante, como el ex-presidente del FC Barcelona, el intelectual Laporta, quien, comprobada su catadura ética y honorable, no es de extrañar que se haya lanzado a la política de cabeza. De todas formas no todos los políticos fuman... Pero deberian entender que "Todo delito que no se convierte en escándalo, no existe para la sociedad (Heine).