domingo, 28 de noviembre de 2010

Queridos lectores, mis más sinceras disculpas por este bache de silencio durante una semana, pero resulta que VODAFONE ME HA ESTAFADO. A raíz de un viaje de 15 días, contraté, aquí en el Escorial, un servicio Módem USB inalámbrico para poder hacer uso de Internet a través de mi ordenador portátil, en un recóndito pueblecito asturiano, que aboné religiosamente, por una duración de dos semanas. Pues, señor, a los 7 días me cortaron la conexión, y por más que he intentado, vía teléfono, solventarlo, no me han hecho ni puñetero caso, me han tomad el pelo y lo único que han accedido es a devolverme el dinero. En fin, se trata de la indefensión del súbdito español ante la estulticia y el descaro negligente, tanto de los mangantes de estamentos públicos, como privados.
Y ahora al avío que tenemos atrasados muchos comentarios y reflexiones, que se acumulan con velocidad de vértigo.
Hoy no voy a hacer ningún recuerdo histórico, para dedicarnos a ponernos al día en actualidad. Y espero alcanzar el mismo grado de interés mediático que el diario "La Correspondencia de España", periódico muy pintoresco del siglo XIX, cuya historia, interesantísima desde el punto de vista profesional, no corresponde hacer aquí, naturalmente. Le llamaban, sarcásticamente "el gorro de dormir", por ser muchos los que no se iban a la cama o no se dormían en ella sin leer este periódico, lo cual da una idea de su gran circulación, dentro de las reducidas tiradas que entonces ha tenido la prensa española. Sus "lapsus" eran frecuentes y uno de ellos se hizo frase corriente. El 29 de Noviembre de 1865 falleció el insigne Ventura de la Vega, despues de muchos días de enfermedad en que el autor de "El Hombre de Mundo" anduvo entre la vida y la muerte, fluctuaciones que "La Correspondencia" reflejaba a diario con todo cariño; y cuando llegó el fatal desenlace salió el popular diario diciendo: "Hoy, por fin, ha fallecido don Ventura de la Vega". La frase resultó ser la nota cómica en aquel duelo, tan sentido generalmente.
¿Y que mayor sentimiento, amigos míos, que el calvario que nos ha tocado atravesar a los españoles en estos últimos años. ¿Que pecado tan grande habremos cometido, para merecer esto? Veamos
Para empezar resulta que CCOO, es decir los comunistas herederos de la mentalidad del mayor asesino de la historia mundial, nos aleccionan reflexionando que "el sadomasoquismo es una forma de sexualidad más sana que todas las demás". Independientemente de que no han aclarado cuales son las demás formas de sexualidad, debo añadir que estoy totalmente de acuerdo con esta afirmación, pues en caso contrario, ¿como se explica que los españoles sigamos flagelándonos con los rubalcabas, las pajines, las sindes y demás castigos bíblicos, y que encima existan progres que experimenten orgasmos al votar al PSOE?.
Y ocurrencia por ocurrencia, la de la intelectual Pajín sobre los hijos de los "maltratadores", es de un ingenio comparable al de un berberecho. Y digo yo, a este tarado ser ¿porque no se la devuelve al zoológico del que procede antes de que haga más daño?
Claro que luego llega el siniestro químico, que en lo único que es experto es en mentir y hacer el mal, y lo arregla dando una lección de jurisprudencia al afirmar que los niños están por encima de la presunción de inocencia; y se queda tan cojonudamente. Habría no obstante que preguntar a los miembros y miembras del Constitucional o del CGPJ, si es que alguna nueva interpretación leguleya ha desterrado el habeas corpus para los varones. Pero mi éxtasis llega a su culmen cuando tratando de sacarle jugo a la reflexión de Rubalcaba, pienso que, serán los niños ya nacidos, porque 2 meses antes del alumbramiento es legalísimo proceder al troceado intraútero del mismo individuo en virtud de un inalienable derecho a seguir la voluntad de su madre. Claro que si por un error involuntario (es decir sin premeditación ni alevosía) al ginecólogo que atiende al parto le fallece el feto durante el mismo, lo empapelan por negligencia. En realidad ya afirmaba Rochefoucauld que "la hipocresía es un homenaje que el vicio rinde a la virtud"
¿Que exagero cuando digo que España es un circo, un sainete, una mojiganga, una dramática burla...? Pues entonces como es posible que en los mítines de CIU, en Cataluña, se coloquen tramoyas, decorados con fotos de monigotes para que parezca que la sala de convenciones al uso está abarrotada de público. La política española es una astracanada maldita y sin gracia, razón por la que yo sigo definiéndome como no demócrata. A pesar de todo, en algún sitio he leído que una ridiculez bien llevada llega a constituir una originalidad.
Y todo esto, no me pregunten porque, me ha conducido a considerar lo curioso que resulta que lo primero que los partidos españoles, desde hace más de dos siglos, hacen cuando quieren "crear un estado democrático" es abordar la redacción de una constitución. Durante el siglo XIX y XX no sé cuantas constituciones (puedo contarlas si quieren, ¿eh?) se han compuesto (incluido El Fuero de los Españoles). ¿Para qué? si luego todos los políticos se las saltan a la torera sin excepción (puede que El Fuero de los Españoles haya sido la que más se ha cumplido, mientras duró). Y además, si nunca se acompaña el espíritu de la Carta Magna en vigor, de un estado de derecho en el que no quepa la agresión a uno o un grupo de ciudadanos, para dar satisfacción a otros. También se decía hace mucho tiempo que el afán de los reformadores es transformar a los pueblos con leyes, cuando las leyes deben ser transformadas por las costumbres si se quiere que tengan eficacia. En fin.
Porque mucha violencia de "género", pero nadie habla de la violencia de estado o terrorismo de estado. No, no me estoy refiriendo al GAL, sino, por ejemplo, del acoso a que somos sometidos los conductores con los radares y las sanciones por subirte 1 Km./hora de la velocidad establecida; que conducir hoy día, por las carreteras españolas es un suplicio, una amargura, una causa de mortandad más elevada que la de los fumadores pasivos; y todo por la pasta.
Porque si al estress que significa la conducción en sí, pendiente del velocímetro, hay que añadir que los pocos momentos que te relajas mirando el paisaje, y jugándote el pasarte en 2 o 3 Km/h, todo lo que ves son unos enormes molinos metálicos o inmensas plantaciones de pantallas, captadoras de energía solar, que se ha dado en llamar elementos de energía renovable, o energía verde, o energía sostenible, o no se que coño, y que no solo sirven para nada práctico, sino que encima te tapan al toro de Osborne. Y digo yo, lo de las energías estas ¿no lo inventó Franco? ¿No le llamaban "Paco el rana" porque saltaba de pantano en pantano? ¿Cuantos pantanos, es decir saltos de agua, es decir centrales hidroeléctricas, se han construido desde 1975?
Y para dejar est soflama, para quien no lo haya leído, respiren hondo, porque los jueces estúpidos no son exclusivos de Hispania, pues que un togado austriaco ha empapelado a un paisano bajo acusación de mal trato a animales, ya que el susodicho reo, comerciante de marisco, al parecer, afianzaba las grandes pinzas de los bogavantes con una fuerte goma elástica. Y es que un bogavante reprimido e infortunado en sus derechos no sabe igual, ni mucho menos, que el crustáceo dichoso en la complacencia de sus inalienables derechos democráticos.
Bueno, que mañana volvemos con nuestro habitual resumen histórico seguido del amargo comentario político. Hasta mañana.

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