sábado, 5 de noviembre de 2011

Ya hemos comentado en más de una ocasión el desarrollo que tuvo la creación de la URSS, trás una sangrienta guerra civil en la Rusia post-zarista y el ascenso al poder de Lenin y sus teorías socio-políticas. El primer gobierno de corte democrático que derrocó al zarismo, formado por moderados mencheviques, resultó a su vez aplastado por los radicales bolcheviques y los soviets del leninismo. Las primeras reformas, esenciales para salir del la Primera Guerra Mundial con cierta bizarría y para iniciar el cambio de sistema en una Rusia arruinada, aunque perdiendo territorios en favor de estados beligerantes, resultaron prometedoras a ojos del mundo pero no pasaban de ser un espejismo, a pesar que con la Nueva Política Económica, Rusia consiguió alcanzar el nivel de desarrollo industrial anterior a la guerra, allá por 1927. Pero aquel proyecto estableció la Dictadura del Proletariado que, ya con Lenin, se llevó por delante la vida de centenares de miles de compatriotas, mediante las depuraciones de los críticos, el hambre, o las enfermedades. No en vano toda oposición a la línea política decretada por el comité central del partido bolchevique fue considerada un leso crimen contra el estado (siempre el estado antes que la persona para el comunismo), por lo que las purgas dentro y fuera del partido gobernante se extendieron, condenando a muerte a millares y millares de rusos.
Pero a la muerte de Lenin, la situación torno en más perversa, cruel y diabólica, pues el advenedizo Stalin creó a sangre y fuego un estado en el que el prioritario no era el estado sino él mismo. La veneración a su persona alcanzó tal grado de paranoia que extendió las purgas incluso contra aquellos que formaban parte de su cuadro principal de mandos pero podían hacerle sombra. El campesino y el obrero no representaban sino una masa de carne al servicio del estado, es decir de él, y las muertes en masa de territorios enteros (en Ucrania dejó morir a más de 3 millones de personas de hambre, por reivindicar las promesas de Lenin de repartir las tierras que ahora pasaban a manos del estado. Ahora la tierra no era para el que la trabajaba, sino para el estado y a su servicio trabajaban los operarios, generalmente en condiciones infrahumanas). El mismo Trotsky, fundador del ejército rojo, vencedor de la guerra civil, tuvo que exiliarse y aún así le persiguió asesinándole en su exilio en Méjico, por el paranoico pavor de Stalin a perder su liderazgo en favor del movimiento Trotskista. La historia nos recuerda que el balance definitivo de la labor Stalinista, es decir el comunismo que ha sido extendido por más de medio mundo, y su proyecto reformador, le asigna la responsabilidad al georgiano de 100 millones de muertes, mediante crímenes de estado, reconocidos por el XX Congreso del PCUS que denunció el terror estalinista como método de conducción política, y, finalmente el fracaso en su presunta labor como solución social y política con la caída del muro de Berlín y la desaparición de la Unión Soviética en 1989/90.


Partiendo de la frase de Gustavo le Bon, que afirmaba que:
"No se puede esperar nada de los hombres políticos para los cuales el mundo es un espejo que refleja exclusivamente sus sueños, sus deseos y temores".
El apunte histórico a que he hecho referencia en el apartado histórico de mi habitual recuerdo de la primera parte de mis intervenciones, viene al caso de una frase de Cayo Lara, a la sazón el comunista que desempeña en España el cargo de coordinador de IU, y que se ha descolgado con que "el capitalismo es incompatible con la democracia" que"nos roban la democracia y castigan a quien la aplica" y "a la izquierda nos toca rescatar la democracia"... ¡¡Un comunista dando lecciones de democrácia!! ¡¡Un heredero de los mayores asesinos de la historia confesándose demócrata!!... ¡Esto es una crisis de prostatismo agudo, es decir es para ponerse a orinar y no echar gota! La clase política española se pronuncia con una desfachatez, una insolencia, un cinismo, una desvergüenza y un descaro propio, solamente, de un ignorante radical o de un hijo de perra solamente útil para el consumo de la más triste indigencia intelectual que caracteriza al pueblo español... Un comunista heredero convencido del estalinismo reclamando un estado democrático... ¿Se imaginan a un fascista o un nazi (ahora no estoy hablando de catalanes), quejándose de la poca democracia de su pais o del inexistente estado de derecho (sin el cual no puede existir democrácia)? ¿Comprenden ahora porque yo me declaro no-demócrata? ¡Mayestático, sencillamente mayestático!
Y saltando, no de oca a oca, sino de majadero a mamarracho, ¿que me dicen de Pepiño quejándose de indefensión? y, naturalmente, solicitando acampar con gasolinera y todo en el Tribunal Supremo, es decir, uno de los altos tribunales comprados por el socialismo masónico zapaterino. ¡Así cualquiera!
La actual campaña electoral, independientemente de que todas son patética y escandalosamente escandalosas, demuestra un caos, una incoherencia y un pandemónium, que resultaría hilarante si no fuera por el drama que se oculta en la nación, trás las bambalinas del escenario que presentan diarios como "El Pais", y no digamos el panfleto "Público", cuya capacidad de distraer con marionetas a las mentes infantiloides es, a más de proverbial y ditirámbico del acta gubernamental, de una habilidad que para sí la hubieran deseado Goebbels o el mismísimo Trotsky fundador del diario "Pravda". Insisto, esto no es una campaña electoral ni nada que se le parezca, aunque cierta utilidad tiene; por ejemplo, los cerdos indignados del 15-M y los etarras ya han manifestado su filial concilio de intereses, ahora que ambos estan intentando "apañarle" la campaña al vil Rubalcaba y al chocho González. Lo ven como yo no exagero nunca. por otro lado me pregunto yo ¿cual es el banquillo que tiene el PSOE? Porque si la opción a Sebastián, la Pajín, la Garmendia, la Calvo, Pepiño, la Bibiana, la Chacón, la Sinde, Moratinos y demás subnormales son Rubalcaba, González, Guerra, la Trini, Bono, Ibarra (el opinador), Solana, etc., es decir las momias, apañados están; no me extraña que la campaña no tenga ideas, que casi es mejor, porque si las ideas son como las de los masones de la logia española que ahora se confiesan creyentes, demócratas y centristas, despues de haber apoyado a ZP en la destrucción de España... ¡Venga ya! De modo que ahora asomáis la cebecita cuando está claro que va a ganar el PP.
Decía Balzac:
"Si todo, en la sociedad como en el mundo, ha de tener un fin, es indudable que hay aquí abajo algunas existencias cuyo objeto y utilidad son inexplicables".

Buenas noches

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