martes, 11 de octubre de 2011

Sabido es que la antigua Roma comenzó siendo un reinado, pues ninguna tribu europea concebía un sistema político distinto, heredero de las costumbres de los Ligures, los Vénetos y, sobre todo, los Etruscos; posteriormente desarrollaron una república, al estilo de algunas ciudades estado griegas, y por último, a partir de Octavio Augusto, un imperio, que con los años se partiría en dos: el imperio de oriente y el de occidente, antes de desmoronarse totalmente. Pero lo que es menos conocido es la primera constitución republicana que diéronse los romanos hacia el 509 adC.
Por aquellos años comienza a manifestarse en Roma una evolución política y social que conduciría al derrocamiento de los Tarquinos y a la proclamación de la república. Ahra es la nobleza quien, a través del senado, asume el poder en Roma. La economía de la ciudad seguía teniendo bases agrarias e incluso la religión oficial tenía un orígen vinculado a las labores de la tierra. Los patricios, que aspiraban a mantener sin cambios la estructura social heredada, se agrupaban en grandes familias, los gens, que honraban a un antepasado común. Del jefe de la gens dependía una numerosa clientela, formada por antiguos esclavos o campesinos muy pobres, que buscaban en él protección. Por otra parte, a menudo los campesinos pobres se veían obligados para sobrevivir a contraer deudas y, como difícilmente podían pagarlas, terminaban por ser vendidos como esclavos. Debilitado el imperio etrusco, los patricios expulsaron a los reyes y adoptaron una constitución republicana, que les aseguraba seguir gozando de todos sus privilegios. El Senado, de 300 miembros, se compone de los jefes de las familias patricias (patres) y de antiguos magistrados. Nominalmente, el poder político queda en manos de dos cónsules magistrados, que poseen igualdad de derechos y son elegidos por un año; en caso de guerra o de conflictos internos muy graves, los cónsules pueden delegar el poder en un dictador. Así el gobierno la justicia y la administración estatal son acaparados por la aristocracia, que comete constantes abusos.


Decía Eduardo Gómez de Baquero en un homenaje a los hermanos Álvarez Quintero:
"Esa Andalucía de las coplas del cementerio, de la cárcel, del patíbulo, no es verdaderamente andaluza, sino gitana; exhala la lamentación del pueblo errante, que vio aparecer España en el siglo XV y que venía empujada por conmociones de la India".
Si he de serles sincero hay algo que me repatea y es tener que darle la razón a un político catalán, en este caso a Duran y Lérida. Porque, en efecto el PER se creó en Andalucía y solo en Andalucía, para auxiliar a las familias necesitadas, o algo parecido, pero han pasado más de 30 años de gobierno regional y esas familias siguen inscritas al invento de manera multitudinaria familiar, es decir que en la misma familia se apunta el padre, la madre y cinco churumbeles y sacan al mes una nómina más elevada que la mía, por ejemplo, sin dar ni golpe. Somos conscientes los españoles que cada región se caracteriza por una sinonimia que les caracteriza ante el resto de la nación: los madrileños por chulos, los aragoneses por cabezotas, los canarios por parsimoniosos, los vascos por bestias, los catalanes por amor a la pela... y por supuesto los andaluces por vagos; y esta condición la llevan marcada a fuego en el carné de identidad y es aprovechada por sus gobernantes, los señores feudales de la calurosa Andalucía del gazpacho, el botijo, la gorrilla a cuadros y la siesta, con una sola intención: perpetuarse en el poder. Porque en 30 años, todavía Chaves y sus compadres no han logrado estimular los cauces que conduzcan al pleno empleo, o algo que se le aproxime, y continúan manteniendo el PER, en una tierra de vagos sin preocupación por el futuro que no sea seguir tumbados en una mecedora a la sombra de un naranjo con el botijo al lado y un pay-pay para abanicarse y espantar las moscas. De modo que ya que se "esfuerzan" en levantarse para ir a votar a una escuela, lugar donde muchos ni se acuerdan para qué sirve, naturalmente votarán al señorito que les suelta la guita sin obligarles a currar. ¿Políticamente incorrecto? Pues me parece de perlas, pero es la verdad.
Otra cosa es que Duran sea un canalla que vendería a su madre, como buen catalán, por arramplar con lo que pueda obligando a trabajar a los esclavos andaluces inmigrantes en su heredad: es decir nacional-socialismo.
Y mientras los españoles nos distraemos en estas gilipolleces y otras más, España está siendo vendida en almoneda a países extranjeros francamente peligrosos (chinos, rusos, árabes) a traves de los bonos nacionales, de modo que cuando nos queramos dar cuenta vendrán de fuera y arrearán con la Cibeles, la catedral de Burgos, la Giralda o el torico turolense. ¡Ah! y no se olviden de ver mañana por la tele el nano-desfilito pero por una cadena que no esté gobernada por los socialistas, o se perderán la bronca a Zapatero, el presidente que no preside nada ya. Total van a ser ocho minutos de castrense regocijo.
He decidido despedirme hoy con un poema bellísimo de Echegaray:
"¿Marca con sello maldito
la culpa que ya existía,
o engendra la que no había,
y da ocasión al delito
... yo tengo aprendido
que lo que dice la gente,
con maldad o sin maldad,
según aquel que lo inspira
comienza siendo mentira
y acaba siendo verdad"

Buenas noches.

No hay comentarios: