domingo, 16 de octubre de 2011

Los que tenemos determinada edad no olvidamos la impresión que nos causó, posiblemente por tratarse de la primera vez que se exhibía en las pantallas de televisión, el aspecto tremendamente depauperado de los niños de Biafra. Recordemos como fue aquella calamidad:
La rendición sin condiciones ofrecida al gobierno de Nigeria por el general biafreño Philip Effiong, pone fin a una guerra genocida que ha conmovido al mundo entero con patéticas imágenes que perdurarán en el recuerdo de varias generaciones. Los sucesos desencadenantes de la guerra de Biafra se iniciaron el 30 de Mayo de 1967 cuando el general Ojukwu proclamó la república independiente de Biafra en la región oriental de Nigeria. Dicha secesión era consecuencia de la rivalidad existente entre las etnias de los hausa y de los ibos, que iniciaron inmediatamente la huida hacia el nuevo estado. Pero el gobierno de Lagos no podía permitir la separación de una parte del territorio que aportaba el 60% del PNB y que además poseía la mayor parte de la riqueza petrolífera del país. Por ello dos meses más tarde estalló la guerra.
Nigeria que contaba con el apoyo de Gran Bretaña y de la URSS no pudo imponer de inmediato su superioridad, ya que el selvático territorio biafreño permitía realizar una excelente resistencia. Sin embargo, la guerra se cebó de manera cruel con la población civil, y no tanto por el efecto mortífero de las armas, sino por el del hambre, ya que, dada la fecha del inicio de la contienda y de los posteriores combates, los campesinos ibos se vieron imposibilitados de cosechar. Por otra parte, la ayuda de la Cruz Roja y de otras organizaciones internacionales, fue escasa, tardía y pésimamente distribuida.
Todo ello provocó la muerte de más de dos millones de seres, que antes de fenecer ofrecieron al mundo del boom económico el verdadero rostro de la extrema miseria. Con la rendición y la huida el día anterior del general Ojukwu, se ponía fin, el 12 de Enero de 1970 a una cruel guerra.


Quien me sigue sabe que suelo evitar hablar de ETA porque, en primer lugar, no estoy dispuesto a dar propaganda a esa chusma de descerebrados, y en segundo lugar porque yo no distingo, no ya entre ETA y los batasunos, como se quieran llamar, sino entre ETA y los demás vascos, por razones que ya he expuesto aquí en más de una ocasión, y suelo hablar de los asesinos vascos en general, lo que incluye a las sotanas con chapela. Pero a pesar de que he dejado pasar 24 horas para ver como se desenvolvían las cosas, creo que no me voy a escapar.
Ya la prensa ha comentado el "parlamento" de marras desde todas direcciones y a través de cualquier tendencia, habitualmente con, o el desconocimiento, o el oportunismo con que los plumíferos, radio y TV suelen hacerlo, y no tengo yo intención de abundar en el asunto, pero para las personas que amamos la lengua española y su uso hay terminologías que intencionadamente inducen a la confusión que no han parado de ser usadas por asesinos, políticos y periodistas suelen envolver este sangriento paquete que deben aclararse. En primer lugar se han alquilado "observadores", tarea de tan ímprobo esfuerzo como la de liberado sindical y que requiere una ética y un aparato digestivo, léase tripas, de semejante entereza, porque cualquier persona honrada y trabajadora normal, hubiera vomitado a los escasos minutos de estar en la misma sala que toda la morralla vasca y no vasca allí reunida, cuyo hedor puede transir la sensibilidad de un legionario de los de principio del siglo pasado. Quizá por eso han comprado a esos sinvergüenzas por tanto de nuestro dinero, para "observar" y con el programa ya escrito.
Por mantenernos en el mundo de los eufemismos, resulta que unos y otros se refieren al hecho de que te persigan en una región española para matarte, arruinarte o expulsarte, con el beneplácito del actual gobierno de Zapatero, llamándolo "conflicto" o como mucho conflicto armado. Se ha escuchado proponer una "paz duradera" (los espíritus podridos jamás alcanzarán ese estado), para la "reconciliación" ("atraer y acordar los ánimos desunidos" según la RAE, y yo, español que juré la bandera bicolor no encuentro otra reconciliación con esta gente que acabar con ellos, con todos, no solo con los de ETA, volviendo a instituir la pena de muerte), a través de una "consulta popular" (si no me equivoco cada 4 años tienen esa oportunidad los vascos y cualquier otra persona) y compensar a todas las víctimas (miren déjense las victimas de tanto lloriqueo y asóciense para una lucha auténtica tipo GAL, sin depender de la administración del estado que fue lo verdaderamente lamentable para mí, al estilo de Luis Olarra que advirtió que depositaba el dinero de la extorsión para que la mafia marsellesa matara a vascos, de los que dio nombre, trabajo y dirección, si alguien le tocaba a él o a su familia y murió felizmente en 1994 sin que los valerosos gudaris, los bizarros soldados vascos que "dan la vida por su patria", acojonados, se atrevieran a acercársele. Eso es para lo que debería servir una asociación de víctimas y no para pasarse el día perdonando, lloriqueando y exigiendo que la canalla vasca "pida perdón", algo que cada vasco podría expresar pero instantes antes de que le dieran garrote, y dando pie a todo este circo). También los asesinos vascos ( los del PSOE, IU y cualquier otro partido que los apoye) instan al gobierno español y frances a dar la bienvenida a nuevas conversaciones para alcanzar un pacto (el actual gobierno español, seguro, hasta el 20 de Noviembre) y cese la actividad armada (¿se refieren a la policía del Faisán?). Pero al parecer nadie ha hablado
Luego existen opiniones colaterales al respecto como las del comunista Cayo Lara, orgulloso heredero del mayor asesino que ha pisado este planeta que dice que Rajoy (que no quiere saber nana de nada) y Rubalcaba (partícipe de los Gal y del 11-M) son iguales. O todos los disgustados por qué no se haya hablado de rendición, ni de disolución ni de entrega de las armas; ¡Vaya sarta de gilipolleces! ¡Ven como yo no debo hablar de este tema, que luego me caliento!
Mientras tanto, y pasando ya a la campaña electoral o lo que sea este despropósito, el vil Rubalcaba ha colocado a González de portavoz, y coge el sátrapa jubilado y reta a un debate, a Aznar, nada menos, ¡Vamos! que le ha mandado sus padrinos, como medida de distracción para que no nos demos cuenta del ingente trabajo que lleva a cabo el CNI, por orden del candidato (que ya no es ni ministro y hace que manda en el país), entre otras cosas prendiendo fuego a la casa de la juez Coro Cillán que investiga el 11-M, a ver si la asustan, y, con el mismo propósito, asaltan el domicilio de Esperanza Aguirre, para ver si se calla, sin intervención de las fuerzas del orden que vigilar su hogar y el entorno y que estaban a buscar setas. Miren ustedes, el socialismo, en general, al igual que el ya inexistente fascismo, salvo en Cataluña, o cualquier otra doctrina dictatorial, especialmente el PSOE que mezcla su antecedente criminal con el no menos ruin masónico, son malhechores, forajidos y magnicidas desde su fundación, y como nos queda todavía un mes para las elecciones, espérense ustedes cualquier cosa.
De cualquier forma "la historia -según Voltaire-, no es otra cosa que una exposición de crímenes y de dolores".
Dante, en "La Divina Comedia", "Infierno", III, nos ofrece unos versos que bien podía haberlos escrito Zapatero, Rajoy, Aido, Chacón, González o... elijan ustedes el personajillo:
"Por mi se va a la ciudad del llanto;
por mi se va al dolor eterno;
por mi se va a la condenada raza".

Buenas noches.

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