miércoles, 8 de agosto de 2012

Bueno Mariano ¿cuando empezamos a quemar iglesias y conventos y a asesinar curas y monjas? ¿cuando vamos a empezar a dar el paseillo a las personas que usen traje y corbata en lugar de zamarra y kufiya palestina y zapatos en vez de alpargatas o deportivas? Ya hace tiempo que se está confiscando, requisando o usurpando propiedades particulares en Andalucía por parte de los marxistas y anarquistas que campan a sus anchas. Las personas que tenemos dos dedos de frente pudimos contemplar desde el final de la dictadura franquista como poco a poco se daba paso, en nombre de una "democracia" cocinada para el momento y al gusto de ellos, a los partidos y partidas de grupos de izquierda que, como no podía ser de otro modo, se lanzaron a la rapiña progresiva, según iban comprobando que en España no pasa nada, con los pretextos más esperpénticos, robando, prevaricando, cohechando, secuestrando y asesinando sin tasa. Ha dicho estos días un tal Hernando del PSOE que las denuncias que estan teniendo lugar, bien que tímidamente y siempre por parte de la prensa, contra el ser más repulsivo que se arrastra por nuestra piel de toro, Rubalcaba, que le recuerda a lo del 11-M... a mi también, porque para conocimiento de los lectores extranjeros, los crímenes que tuvieron lugar el 11 de Marzo de 2004 fueron diseñados y llevados a cabo por fuerzas que obedecían a los intereses de las autoridades que querían provocar un cambio de gobierno; y lo consiguieron. Los trenes que explotaron, consiguieron matar a 191 personas y dejar heridas o mutiladas para siempre a 1.858, con la única finalidad de obtener el poder... y no fue una acción terrorista islámica, sino totalmente nacional. Ahora los atentados contra la propiedad privada en Andalucía (ya conocemos los que se producen en Cataluña, feudo del nazismo ibérico, y en Vascongadas tierra de asesinos mezcla de fascistas -PNV- y marxistas -ETA-) no provocan inquietud alguna en el ánimo de Mariano y cofrades, muy atentos en ver como salvan los muebles, los suyos, a costa de la masacre de trabajadores al servicio de la administración pública. Porque si hacemos nuestra habitual reflexión histórica recordaremos como los nazis alemanes acababan con la vida de todas aquellas personas enfermas o que consideraban deficientes de alguna manera; Mariano y secuaces, que no tienen cojones para acabar con la sangría corrupta de las autonomías, de las subvenciones a sindicatos, a patronales, a partidos políticos y a amiguetes (muchos de ellos con varias retribuciones del estado desde hace muchos años) y a poner en la calle a tantos (alrededor de un millón) enchufados contratados por Zapatero para pagar favores y dejar bien surtida la quinta columna, resulta que a los empleados de la función pública que enfermen no se les abonará más que el 50% de su sueldo los tres primeros días, el 75% hasta el día 21 y el total despues. Si se trata de familias que solo viven de ese sueldo (la mayoría mileurista) y no van a llegar a fin de mes, pues que se jodan; si esto no es nacismo que venga Dios y lo vea. Pero no dejemos aquí nuestra memoria histórica y remontémonos a la Segunda República, de tanto regusto para los rojos de este país, y meditemos sobre la cobardía de Sanjurjo al poner al servicio de la misma a la Guardia Civil, la misma que en Andalucía ha callado los atropellos socialistas, comunistas y anarquistas durante años, que ha exculpado a los asesinos del 11-M no deteniendo la caravana de explosivos despues de haberlos interceptado o han "negociado" con el delincuente del alcalde de Marinaleda y sus canallas sin detener a nadie. Además otro Rajoy, Alcalá Zamora, primer presidente de la república, cobardemente salió corriendo cuando comprobó las atrocidades que se cometian en la España de 1931, en tanto que Azaña, que hoy se llamaría Cayo Lara, justificaba los asesinatos diciendo que todas las iglesias y conventos de Madrid no valían lo que la vida de un miliciano. Todo lo conocemos a estas alturas. En definitiva, sois todos una panda de canallas, cobardes y delincuentes y ¡sálvese el que pueda! 

Que Dios les guarde.

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